Llegada a Lima y traslado al hotel Atemporal.

Experiencia gastronómica con Penélope Alzamora, chef peruana que tuvo un restaurante con Gastón Acuario. Ir a la pescadería y al mercado para comprar ingredientes y aprender a cocinar cebiche de lenguado, conchas a la parmesana y sudado de chita.

Un paseo guiado a lo largo del Sistema de Trochas.

Excursión al lago Sandoval en la Reserva Nacional de Tambopata. Navegar en una canoa de madera.

Por la noche, paseo en bote nocturno.

Alojamiento en Inkaterra Reserva Amazónica.

Iremos al Santuario histórico de Machu Picchu (una de las siete maravillas del mundo), partiendo desde el Valle Sagrado en tren Hiram Bingham.

Tras la visita, traslado a la estación para coger el tren de vuelta a Cusco. Te preparan una cena muy buena con unos cocktails preparados en barra por el coctelero y amenizado todo por un grupo de música en directo muy divertido.

Llegada a Cusco y traslado al hotel.

Visita de la ciudad de Cusco: su catedral, su Templo del Sol y el barrio de los artistas (el barrio de San Blas).

Alojamiento en el Hotel Palacio Nazarenas, un antiguo convento de monjas de clausura y conservan mucho de aquella época como los techos o su capilla. Cuenta con el mejor restaurante de Cusco, Mauka de la chef Pía Montes (mujer del chef Virgilio) decorado muy bonito y cuidando todos los detalles. La comida es deliciosa y el desayuno también.

En Cusco tienen costumbres gastronómicas distintas a las de Lima (mucho menos pescado, solo trucha), su plato típico en todas las celebraciones es el cuy (nuestra cobaya) asada, y por las carreteras venden chicharrones, corteza de cerdo frita y “chancho” cocinado en la caja china, que es una especie de barbacoa en caja cerrada, todo ello acompañado de su chicha que es la bebida más famosa que se consigue con el maíz germinado y fermentado.