India, una nueva experiencia

El encanto de esta tierra ajena e incomprensible, es tan entrañable que todo lo que pueda catalogarse como “rareza”, rápidamente pasa a un segundo plano. Hay que permitirse entrar en la llamada “frecuencia India”, para poder experimentar un tipo de felicidad que viviendo en Occidente, no tenemos idea que existe. Las personas son especialmente amables, curiosas, abiertas, hospitalarias y respetuosas.

Una caminata por las atestadas y estrechas calles de Chandni Chowk en Old Delhi, los contraluces de los detalles de piedras preciosas que irradian las paredes marmoladas del Taj Mahal, los llamativos colores de los saris que llenan de vida cualquier pastizal, las vacas que caminan a un ritmo lento, confiadas, sabiendo que nadie les hará daño, los monos atentos a cualquier objeto brillante que puedan robar a los turistas curiosos, los rituales en los templos majestuosos o en cualquier ángulo de esquina, dueños de turbantes por doquier que regalan sin motivo especial la sonrisa más perfecta que nunca vimos antes en ningún anuncio de dentífrico, forman parte de ese combo especial capaz de generar dentro de nuestro ser una sensación que puede ser traducida en tres palabras: “¡India- es-maravillosa!”

“India es el lugar en la tierra donde todos tus sueños encuentran un hogar desde que comienzas a soñar”. Romain Rolland